PROFECO Advierte riesgos si comes mucho Tajín

Salud
Typography
  • Smaller Small Medium Big Bigger
  • Default Helvetica Segoe Georgia Times

El Tajín, ese condimento mexicano que combina el sabor ácido, picante y salado, es un favorito para realzar frutas, botanas y bebidas. Sin embargo, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) y la organización El Poder del Consumidor han encendido las alarmas sobre los riesgos de su consumo excesivo.

A continuación, exploramos qué dice la Profeco sobre los efectos de comer mucho Tajín, desglosando los puntos clave para entender sus implicaciones en la salud.

El Tajín, ese condimento mexicano que combina el sabor ácido, picante y salado, es un favorito para realzar frutas, botanas y bebidas. Sin embargo, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) y la organización El Poder del Consumidor han encendido las alarmas sobre los riesgos de su consumo excesivo.

A continuación, exploramos qué dice la Profeco sobre los efectos de comer mucho Tajín, desglosando los puntos clave para entender sus implicaciones en la salud.

¿Por qué hace daño comer Tajín según la Profeco?

El daño potencial del Tajín radica principalmente en dos ingredientes: el sodio y el dióxido de silicio.

Una cucharadita de Tajín Clásico contiene 968 miligramos de sodio, una cantidad alarmante que representa casi la mitad del límite diario recomendado para adultos (2 gramos, según la Organización Mundial de la Salud) y más del 60% para niños.

El exceso de sodio puede provocar hipertensión arterial, endurecimiento de arterias, accidentes cerebrovasculares, problemas renales y retención de líquidos, lo que afecta órganos vitales como el corazón y los riñones.

Además, el dióxido de silicio, usado como antiaglutinante, puede causar silicosis si se inhala y, en ingestas prolongadas, podría generar toxicidad aguda, afectando los pulmones, el sistema nervioso y las funciones celulares. Aunque este aditivo está permitido en pequeñas cantidades, su acumulación plantea riesgos a largo plazo.

¿Por qué hace daño comer Tajín según la Profeco?

El daño potencial del Tajín radica principalmente en dos ingredientes: el sodio y el dióxido de silicio.

Una cucharadita de Tajín Clásico contiene 968 miligramos de sodio, una cantidad alarmante que representa casi la mitad del límite diario recomendado para adultos (2 gramos, según la Organización Mundial de la Salud) y más del 60% para niños.

El exceso de sodio puede provocar hipertensión arterial, endurecimiento de arterias, accidentes cerebrovasculares, problemas renales y retención de líquidos, lo que afecta órganos vitales como el corazón y los riñones.

Además, el dióxido de silicio, usado como antiaglutinante, puede causar silicosis si se inhala y, en ingestas prolongadas, podría generar toxicidad aguda, afectando los pulmones, el sistema nervioso y las funciones celulares. Aunque este aditivo está permitido en pequeñas cantidades, su acumulación plantea riesgos a largo plazo.

¿Quién es el dueño del chile Tajín?

El chile Tajín es producido por Empresas Tajín, una compañía mexicana fundada en 1985 por Horacio Fernández Castillo. Desde su creación en Zapopan, Jalisco, la marca se ha consolidado como un ícono de la gastronomía mexicana, exportándose a más de 30 países.

Aunque la Profeco no menciona directamente a la empresa en sus advertencias, sí critica la estrategia publicitaria de Tajín, que resalta la ausencia de colorantes y saborizantes artificiales, pero omite destacar los riesgos del sodio y el dióxido de silicio. Esto puede generar una percepción errónea de que se trata de un producto completamente natural e inocuo.

¿Qué recomendaciones da la Profeco sobre el chile Tajín?

La Profeco y El Poder del Consumidor instan a moderar el consumo de Tajín, especialmente en niños y personas con problemas cardíacos o renales.

Recomiendan leer cuidadosamente las etiquetas, ya que el sello de “Exceso de sodio” puede pasar desapercibido debido al diseño cilíndrico del envase.

Como alternativas más saludables, sugieren usar condimentos naturales bajos en sodio, como:
Chile de árbol en polvo
Mezclas de chiles secos sin sal
Combinaciones de pepino con limón y chía
Estas opciones ofrecen sabor sin los riesgos asociados al alto contenido de sodio o aditivos.

Además, exhortan a los consumidores a no dejarse llevar por la publicidad que presenta al Tajín como un producto “natural” y a ser conscientes de los efectos acumulativos de su consumo frecuente.